El calor en los perros: qué les pasa y cómo ayudarles a mantenerse frescos

Cuando suben las temperaturas, no solo los humanos sufrimos las consecuencias del calor: los perros también lo pasan mal. A diferencia de nosotros, ellos no sudan por la piel para regular su temperatura. Su forma principal de liberar el exceso de calor es a través del jadeo y, en menor medida, mediante las almohadillas de sus patas. Esto hace que sean especialmente sensibles a los días calurosos, y que corran el riesgo de sufrir un golpe de calor, una situación potencialmente mortal si no se actúa a tiempo.

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¿Qué le pasa a un perro cuando tiene calor?

Cuando un perro tiene demasiado calor, su cuerpo empieza a esforzarse para bajar la temperatura interna. El jadeo se intensifica, busca zonas frescas o sombra y puede mostrar señales como:

• Lengua fuera de forma continua

• Salivación excesiva

• Agitación o ansiedad

• Debilidad o decaimiento

• Respiración acelerada

• Encías más rojas de lo habitual

• En casos graves: vómitos, descoordinación e incluso pérdida de conciencia

Los cachorros, los perros mayores, braquicéfalos (como los bulldogs o carlinos) y los que tienen sobrepeso son especialmente vulnerables.

10 consejos para proteger a tu perro del calor

Aquí tienes una lista de recomendaciones sencillas y efectivas para evitar que tu perro sufra por las altas temperaturas:

1. Agua fresca siempre disponible
   Asegúrate de que tenga acceso constante a agua limpia y fresca. Puedes añadir cubitos de hielo al bebedero para mantenerla fría por más tiempo.

2. Evita paseos en horas de máximo calor
   Sal a primera hora de la mañana o por la noche, cuando el asfalto no quema y el ambiente es más fresco.

3. No lo dejes nunca en el coche
   Aunque esté a la sombra o con las ventanas entreabiertas, la temperatura dentro del coche puede subir rápidamente y ser letal.

4. Refresca su cuerpo
   Puedes mojarle las patas, el cuello y el vientre con agua fresca. No uses agua helada, ya que puede provocar un choque térmico.

5. Ofrece zonas de sombra
   Si está en el exterior, asegúrate de que tenga una zona protegida del sol donde pueda descansar.

6. Evita el ejercicio intenso
   Jugar o correr en las horas de calor puede sobrecalentar rápidamente a tu perro. Modera su actividad física.

7. Usa alfombrillas o colchonetas refrigerantes
   Son una excelente opción para que el perro pueda tumbarse y bajar su temperatura corporal.

8. Hazle helados caseros para perros
   Congela caldo bajo en sal, trozos de fruta apta para perros o yogur natural sin azúcar. ¡Les encantan y los refrescan!

9. Cepilla su pelo con regularidad
   Eliminar el pelo muerto ayuda a que el aire circule mejor por su piel y favorece la transpiración.

10. Controla signos de golpe de calor
    Si detectas síntomas como jadeo extremo, temblores, debilidad o vómitos, actúa rápido y consulta con tu veterinario.

El verano puede ser una época muy divertida para compartir momentos con tu perro, pero también requiere precauciones. Cuidar su hidratación, evitar el sobrecalentamiento y ofrecer un entorno fresco es clave para que disfrute del calor sin sufrirlo. Porque su bienestar, como siempre, depende de ti.